Fantasmas y más. VALLADOLID

En Fantasmas y más, tratamos de gente que tuvo un final triste en distintos sitios de Valladolid, y su espíritu vaga aún contando lo que les pasó. 

Con un guía que nos indica que el cementerio judío estuvo donde nos encontramos, juste en la avenida de Recoletos. 

Casa Mantilla

Pasamos por la casa Mantilla, uno de los edificios más destacados, por no decir el más importante, de los surgidos en Valladolid al amparo del desarrollo industrial burgués de finales del siglo XIX. Ocupa el solar que en el pasado ocupó el Hospital de Resurrección a las afueras de la antigua ciudad y junto a un ramal del río Esgueva. En ese hospital sitúa Cervantes, que vivió apenas a 200 metros de ahí, su obra "El coloquio de los perros". Diseñada en 1891 por Julio Saracíbar, fué el primer edificio pucelano con ascensor, electricidad y estructura metálica.

Cervantes

Justo después vamos a la casa del escritor mencionado, la de Cervantes, en donde por boca del espíritu de Don Gaspar de Ezpeleta, nos enteramos de su versión de los hecho acaecidos la noche del 27 de junio de 1605.  Don Gaspar era un caballero navarro del Hábito de Santiago quien resultó herido de muerte en la antigua calle del Rastro de la capital vallisoletana. Fallecería dos días después si confesar quién había sido su verdugo. Nunca se conoció la identidad de la persona que le acuchilló, pero hasta once personas fueron llevadas a prisión y estuvieron en el punto de mira de la investigación. Entre ellas, el morador de una de las casas vecinas al lugar del crimen: Miguel Cervantes.

El duque de Lerma

Tras esto nos dirigimos al convento de Porta Coeli, donde la amante de Don Rodrigo Calderón, quien se encuentra sepultado en la iglesia junto a su amante, nos cuenta sus andanzas y las del Duque de Lerma. Rodrigo Calderón de Aranda fue un político y militar español que sirvió al rey Felipe III durante el siglo XVII. Ascendió rápidamente en la corte española y llegó a ser uno de los favoritos del duque de Lerma, el valido o principal consejero del rey. 

El susodicho duque de Lerma fue acusado de cometer varios delitos durante su mandato. Uno de los más conocidos fue el cambio de la capital de Valladolid a Madrid para enriquecerse. Aunque el cambio de capital había sido discutido durante años, Lerma tomó la decisión sin consultar al Consejo de Estado ni al resto de la corte. Esto fue visto como un abuso de poder y una falta de consideración por parte de Lerma, y contribuyó a su caída del poder y a su exilio posterior.

La Valeriana

Siguiente parada en la colegiata de Santa María la mayor, o lo que queda de ella. Al lado está la catedral y cuyas paredes se surtieron de las de la colegiata, de ahí que no quede mucho de esta. En la catedral había un campanario, con el terremoto de 1755 esta se debilitó y terminó cayendo en 1843 cuando cayó un rayo, sepultando a "la Valeriana", la mujer del campanero Juan Martinez. Ella, la propia Valeriana, nos cuenta lo que pasó, que queda bien definido en este fragmento del magnífico libro de Miguel Ángel Galguera "La buena moza":

"En el crítico momento del desastre se hallaban dentro de la torre, en un cuarto inmediato al campanario donde moraban, el campanero Juan Martínez y su mujer Valeriana Pérez.

El expresado Juan Martínez, en vez de auxiliar a su cónyuge como hubiera sido lo propio pese a sus muchos años, por aquello del instinto de conservación, al comenzar el desplome trató de salvar los propios huesos refugiándose en el hueco de una ventana. Mientras el cauteloso se apartaba, la pobre, y desamparada, y más joven y mejor parecida, Valeriana, cayó revuelta entre las piedras, dos o tres campanas y la magnífica maquinaria del reloj hasta el fondo de la capilla de San Juan Evangelista.

El campanero Juan Martínez, salvado por los pelos del desprendimiento, daba voces lastimeras a tierra y cielo desde la ventana del refugio, aquella que se sitúa debajo de lo que justo tres minutos antes era la torre catedralícia, mismo bajo uno de los arcos que nombran de los Cuatro Vientos. Desde semejante cima de la trabadas y medio derruidas piedras, el casi viejo, y prudente además, imploraba socorro a voz en cuello. Fue rescatado por cuatro vecinos que por allí pasaron y que usando la escalera de uno de ellos llamado Jorge Somoza bajaron al asustado e ileso campanero a tierra firme." 

El sillón del Diablo

También tenemos la visita de un joven asesinado por la santa inquisición, se trata de Andrés de Proaza, estudiante de medicina e hijo de un rico comerciante, quien tras asesinar a un niño de 9 años, para llevar a cabo sus estudios de medicina, es arrestado y condenado a muerte. Andrés confesó que tenía un pacto con el Diablo a través de una silla que estaba en su escritorio, denominada "El sillón del Diablo", actualmente en el palacio de Fabio Nelli. El escritor Victor Manuel del Pozo utiliza esta historia para crear su libro "El sillón del diablo".

Zorrilla

Entre otras explicaciones del guía, llegamos al último destino, la casa del escritor Zorrilla, en donde el espíritu nos cuenta como era vivir con el escritor. Recordemos que José Zorrilla y Moral vivió de 1817 a 1893, fue un escritor español conocido por sus obras de teatro y poesía. 

Nació en Valladolid y estudió derecho en Madrid, pero pronto se dedicó a la literatura y se convirtió en uno de los escritores más populares de su época.

Entre sus obras más famosas se encuentran el drama romántico "Don Juan Tenorio" y la comedia "El Rey Loco". También escribió numerosas poesías, incluyendo "La Canción del Olvido" y "Los Últimos Ritos del Duque de Osuna". Además de su trabajo como escritor, Zorrilla también fue un activista político y un defensor de la causa carlista durante la Guerra Civil Española. Fue una figura prominente en la literatura española durante el siglo XIX y sus obras siguen siendo leídas y representadas en la actualidad.

Por:  David Sanchez