CENART: Un faro para las artes en México
El Centro Nacional de las Artes (CENART) en la Ciudad de México es más que un simple complejo cultural; es un espacio vivo y dinámico donde convergen la difusión de las artes y el desarrollo académico de nuevas generaciones de artistas en el país. Raúl Uribe, director de la programación artística del CENART, destaca la misión dual de la institución: "En primer lugar, hacer difusión de las artes nacionales e internacionales, y en segundo lugar, fomentar el desarrollo académico de los artistas jóvenes de este país".
La esencia del CENART
Fundado en 1994, el CENART se extiende sobre 12 hectáreas, un vasto espacio que abarca un kilómetro de punta a punta. En su interior, alberga cinco escuelas profesionales que cubren teatro, danza, cine, música y artes plásticas, además de cinco centros de investigación. "Es un complejo que alberga al interior de sus instalaciones cinco escuelas profesionales de arte y cinco centros de investigación, y nueve teatros entre salas de concierto, teatros de teatro, teatros de danza y algunos otros foros", explica Uribe. Este espacio no solo es un punto de encuentro para artistas, sino también un lugar de aprendizaje y exploración, donde más de mil estudiantes e investigadores, junto con 400 administrativos, forman parte de una comunidad vibrante que recibe a aproximadamente 12,000 visitantes cada semana.
Gobernanza y colaboración
La administración del CENART es un ejemplo de colaboración entre diferentes instituciones. "Hay dos jurisdicciones que comparten el uso de este espacio: el Centro Nacional de las Artes, que tiene a su cargo el cuidado de la infraestructura, es decir, de los edificios, su mantenimiento, los jardines, etcétera, y la programación de los teatros", señala Uribe. Sin embargo, las escuelas que operan en el CENART están bajo la gobernanza del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), que se encarga de los aspectos académicos, incluyendo la administración de los docentes y alumnos, así como los programas de estudio. Esta relación simbiótica permite que ambas entidades trabajen en conjunto para ofrecer una experiencia educativa y cultural integral.
Una programación rica y diversa
La programación artística del CENART es vasta y diversa, con un promedio de 20 espectáculos diferentes cada mes. Uribe detalla que "al mes tenemos una programación aproximada de 20 espectáculos distintos, entre conciertos, obras de teatro, obras de danza, algunas piezas de circo que también hacemos y algunas otras intervenciones de orden performático en algunos espacios alternativos o, digamos, disruptivos de la arquitectura del CENART". Los precios para estos espectáculos varían entre 100 y 200 pesos, con un costo común de 150 pesos, aunque también se ofrece una amplia gama de actividades gratuitas. "El CENART es una institución del gobierno de México dependiente de la Secretaría de Cultura, por lo tanto, tiene la responsabilidad de garantizar el ejercicio de los derechos culturales de la población", afirma Uribe.
Programación nacional e internacional
El CENART mantiene un equilibrio entre programación nacional e internacional, con un 80% de contenido nacional y un 20% de eventos internacionales. Uribe comenta: "Para una institución que trabaja 365 días al año, es realmente significativo". Ejemplos de esta programación internacional incluyen la visita de compañías italianas de danza en octubre, el Festival Internacional de Piano En Blanco y Negro en septiembre, y el Festival Eurojazz en noviembre. Esta diversidad se logra gracias a la participación activa del equipo de programación en festivales y eventos internacionales, así como a la colaboración con promotores culturales de todo el mundo. "Muchos de los integrantes del equipo de programación artística a menudo tienen la oportunidad de ver espectáculos fuera del país... y así vamos tejiendo redes de colaboración", explica Uribe.
Innovación en espacios alternativos
El CENART también se distingue por su capacidad de innovar en la forma en que presenta el arte, explorando espacios no convencionales dentro de sus instalaciones. "Estamos investigando en algunos espacios alternativos con piezas más del orden performático", menciona Uribe, señalando el trabajo reciente de Rodrigo García, un destacado creador español especializado en teatro posdramático y documental. García intervino en el sótano del estacionamiento del CENART, transformando este espacio en un escenario experimental con luces y proyectores, creando un "primer borrador de un espectáculo muy interesante".
Celebrando tres décadas de arte
Este año, el CENART celebra su 30 aniversario, un hito marcado por una serie de actividades especiales que reflejan su compromiso continuo con el arte y la cultura. "Este año estamos celebrando 30 años y para celebrarlo hemos emprendido muchísimas actividades, ha sido una fiesta interminable de programación artística y de actividades académicas", comenta Uribe con entusiasmo. Entre los proyectos más destacados se encuentra el diplomado en formación circense, el único programa gratuito en artes circenses en la Ciudad de México. Este diplomado, iniciado en 2024, forma parte de una serie de iniciativas lanzadas en conmemoración del aniversario del CENART.
Otro programa emblemático es "Con la música en las venas", que celebra la música sonidera, un género profundamente arraigado en los barrios de la Ciudad de México. "El sonidero construye un territorio de paz donde la gente se reúne a bailar de manera armónica, alegre", explica Uribe. Desde su lanzamiento, este programa ha atraído a miles de personas al CENART, convirtiéndose en un espacio de convivencia intergeneracional donde se mezclan las tradiciones culturales con la vida contemporánea.
Reflexionando sobre el futuro
Además de celebrar su historia, el CENART también mira hacia el futuro con una serie de simposios y eventos que exploran temas emergentes en el arte y la cultura. "Esta semana, mañana y el viernes, vamos a tener una actividad muy importante también conmemorativa del aniversario, que es un simposio internacional que se llama 'Migraciones'", detalla Uribe. Este evento abordará no solo la migración geográfica, sino también las "migraciones simbólicas en los espacios de desplazamiento de los puntos de referencia del arte", incluyendo debates sobre la inteligencia artificial, el pensamiento científico en las artes y la evolución de la educación artística.
Un legado de arte y cultura
El CENART fue creado en respuesta a las necesidades de la comunidad artística mexicana, una visión impulsada por los propios artistas que demandaban un espacio adecuado para albergar todas las disciplinas artísticas en las mejores condiciones posibles. "Lo crearon en primer lugar los artistas de México, que impulsaron en la conversación pública la necesidad de un complejo que pudiera albergar a todas las artes en las mejores condiciones", explica Uribe. A lo largo de sus 30 años, el CENART ha evolucionado y florecido, manteniéndose fiel a su misión de ser un faro para las artes en México.
Bajo la dirección de Antonio Zúñiga, un reconocido dramaturgo y director de escena, el CENART ha experimentado un renacimiento, rehabilitando infraestructuras y ampliando su programación para incluir a todos los artistas del país. "Con esa visión, ahora desde la administración pública, permite articular proyectos para beneficiar a las poblaciones", concluye Uribe, subrayando la importancia de continuar este legado de arte y cultura para las futuras generaciones.